Una muy buena decisión.

Un caluroso saludo navideño para nuestros lectores, nuevamente paso para actualizar este espacio con una entrada bastante peculiar, en realidad no es ningún texto preparado, es un comentario dejado en Facebook a la entrada anterior, pero es tan sincero y único que vale la pena postearlo y darlo conocer a todos ustedes, sin dejar de lado las buenas críticas que ha recibido por parte de los compañeros. Sin más preámbulo, me place compartir con ustedes este escrito realizado por Marcela Hernández, una de las semillas más polémicas, amigables y divertidas de nuestra familia. Un abrazo y hasta la próxima.

"El día del lanzamiento del Ballet Folclórico, llegué por casualidad al teatro imperial (la verdad fue porque me salí de una fiesta muy mala) y al verlos en el escenario pensé que eran un grupo de danza más con nada nuevo, pero mientras transcurrían las presentaciones la energía y el entusiasmo en cada baile me demostraron que estaba equivocada, me impactó cuando presentaron indígenas, y me fascinó el Sanjuan y verlos con esa energía y esa fuerza al bailar que me dije: yo quiero estar ahí algún día, junto con ellos.

Un día, llegando a los laboratorios miré un cartel en la pared, que invitaba a ser parte de la familia del Ballet, y lo pensé dos veces; porque lo primero que me dije fue: ahí no me reciben si yo no sé bailar; pero eran tantas las ganas que tenía de entrar que me inscribí.

El primer día que asistí a un ensayo miré niños feos, cabezones, niñas oji cerradas, feitas, sin imaginarme que algún día llegaríamos a ser un parche tan chévere, y en todos estos meses que he compartido con mis nuevos amigos, aprendiendo no solo del “maistro” si no de los diferentes monitores que hemos tenido que han sido los principales autores de todo lo que somos ahora, claro que nos falta todavía y mucho, pero siempre contamos con el apoyo de todos y cada uno de los miembros del ballet para mejorar cada día.

Se les agradece a todos y cada uno q han ayudado a que esta pobre niña aprenda a moverse, y todos los momentos chéveres que sé hemos pasado, ahora digo tengo otra familia llena de locos, vagabundas, cualquieras, cabezones, rojos y todos la variedad que conforma el Ballet Folclórico Universidad de Nariño.

Ahora hacemos parte de un nuevo proceso de formación, pero siempre vamos a seguir siendo semillas de corazón, porque fuimos los primeros, y los mas chéveres y locos de todos.

Abrazos y besos a todos y se los quiero harto, harto bola de feos."